jueves, 13 de septiembre de 2007

LLAMAR LA ATENCIÓN CON LIBERTAD

"Tal como somos, así vemos". Ralph Waldo Emerson

Es un acuerdo tácito entre la critica cinematográfica mundial, entender las películas desde tres tendencias: la comercial, la industrial y la de autor. Lo que sigue, pretende llamar la atención sobre el cine comercial actual colombiano y afirmar que para un adecuado desarrollo de las imágenes nacionales se debe fortalecer la producción y la difusión de filmes no comerciales, y la crítica alrededor del séptimo arte, clave para valorar otras formas de imágenes.

LLAMAR LA ATENCIÓN CON LIBERTAD.

Texto resultado del X Encuentro nacional de críticos de cine en Pereira. Agosto, 2007. Colombia.

Las redes sociales, entre ellas la de los mejores amigos, son indispensables para una adecuada vida en la sociedad. Los seres humanos necesitan contar con personas cercanas y conocedoras de si. Normalmente la historia del aprendizaje suele desarrollarse con ellos creando intimidad; creando un conjunto de personas que se consideran "los mejores amigos".

Una de las funciones que cumplen este conjunto de personas es advertirnos de malos comportamientos, de asuntos en los cuales, los conocidos, o compañeros de trabajo no "se meten". Con estas personas se establecen en su mayoría relaciones sociales complejas, donde por el conocimiento que se tiene de los comportamientos problemáticos del otro, se le llama la atención con libertad.

Para un adecuado tratamiento en el conjunto de los comportamientos inadecuados como: la fobia social, las obsesiones, la ansiedad, los trastornos disociativos, de control de impulsos, de estado de ánimo, la esquizofrenia, las adicciones y problemas de comunicación social se requiere un decidido apoyo de los mejores amigos. El grado de confianza y monitoreo que pueden ejercer la red más cercana de las personas afectadas es indispensable para una mejoría.

Así es la relación que mantiene la crítica del cine y el cine. Desde la intimidad, la confianza, el conocimiento y el afecto los críticos evalúan, analizan y explican el manejo de los materiales en la expresión de un momento histórico, características que deben cumplir las obras para tener una condición valida de arte.

Hablar de lo que pasa en el contexto colombiano con seriedad y métodos de análisis esta mal visto. Se deduce ingenuamente que es un estorbo por consiguiente se incentivan las miradas únicas y positivas de lo que sucede.

Existe un "rumor" del cine colombiano actual, generado desde la ausencia de análisis del fenómeno, por personas que no saben de él cine y hablan o comentan desde espacios repetitivos y abundantes en los medios masivos de comunicación. La información sobre el filme se limita a la entrevista del realizador y del elenco pero no trata sobre el manejo de los materiales en lo audiovisual.

Este fenómeno ocurre en muchos otros contextos, pero no con una ausencia tan evidente de análisis, crítica y medios para su difusión. De 44 millones de colombianos no más de 15 se dedican a estudiar y publicar información sobre el séptimo arte. Existe una sola revista sobre cine que mantiene con inconvenientes su trabajo.

No se puede hablar de cine –ni de país- sin crítica. Los críticos son los responsables del avance en las expresiones artísticas, de los descubrimientos interesantes y la definición de movimientos.

La oferta y la demanda no pueden ser los conceptos con los cuales se evalué el desarrollo de un arte. Los componentes de industria del cine son importantes pero no definitorios en su calidad. "Soñar no cuesta nada" con más de un millón de espectadores no es un mejor manejo de lo audiovisual que "La historia del baúl rosado" con sus treinta mil asistentes.

No se trata de soslayar la subjetividad; es como afirmar que a los 8 de cada 100 colombianos que no sabe leer ni escribir, no deberíamos enseñarle; se trata precisamente de enriquecer las visiones de cada persona con la posibilidad de comparar "platos" visuales y disfrutar de los diversos sabores del cine.

En las películas que perduran en el tiempo -por ser obras de arte – no hay buenos ni malos, hay personajes únicos e irrepetibles; a veces requieren ser vistas más de dos veces para una correcta apreciación; le hablan al ser humano de una manera única; son hechas más para la excepción que para la regla.

El audiovisual colombiano no esta representando distintas formas de ser; repite estereotipos y formulas empezando a estratificarse. Aunque ha logrado una gran calidad técnica, no tiene búsquedas estéticas; lo técnico es un material de lo audiovisual pero no lo definitorio.

Los realizadores trabajan en el cine como en la publicidad, sin pasión, haciendo bien la tarea por la nota de "Stilo" y "De otro mundo", la invitación a bares y a la sala de cine del Palacio de Nariño. Pocos son los que reflexionan sobre su obra, sobre el manejo de las imágenes en movimiento y el sonido en una película para inmortalizar un momento histórico. Existen argumentos económicos para justificar una estética. No se pueden construir las cosas bellas sin reflexión, sin que se le vaya al creador la vida en ello, sin ética frente a la representación de un conjunto de humanos; Especialmente de un país creador de imágenes fuertes, de asesinatos, de pistolas, de engaños; con índices de anormalidad en casi todos los aspectos sociales. Sin considerar esas realidades, esos contextos, es muy difícil hacer un producto que permanezca en "El Tiempo"; aunque se pueda salir en él.

Si se analiza el tema de la infidelidad por medio de películas colombianas como: "Confesiones a Laura", "La gente de la universal", "Bluff" y "Esto huele mal" notaremos grandes diferencias de análisis y representación del fenómeno.

En cuanto a la medida más objetiva del séptimo arte históricamente: los festivales de cine; las ultimas películas colombianas privilegiadas en el mundo como obras fílmicas fueron: "Sumas y restas" y "La sombra del caminante" al participar en el festival de cine de San Sebastián y antes "La vendedora de rosas", "Rodrigo D no futuro" y "Cóndores no entierran todos los días" habían participado en la selección oficial del Festival de cine de Cannes, lugar donde se reúnen la mayor cantidad de críticos de cine.

Es necesario repensar el modelo de la industria. Meditar, analizar y construir un modelo o modelos alternativos de producción, distribución y exhibición de películas. Se debe construir la noción de cine independiente, alternativo de autor (documental y de ficción) sobre la base que el arte no debe considerarse un margen que no deba rentar, de un cine lento y aburrido para los excéntricos en "cine clubes".

No debemos hacer cuentas alegres con el cine colombiano actual, por más que se acelere (para nosotros) el ritmo de producción y estreno de películas. Debemos promover que se hagan las películas, pero cuidar mucho más lo que se diga y lo que se haga creer: no por estar haciendo películas estamos haciendo un cine deseable y maduro. Si se hacen películas sistemáticamente, mucha más gente estará entrenándose y trabajando en el medio y es posible que en esa dinámica, logren surgir autores que le den su temperamento a sus películas y surja ese cine que esperamos algún día con madurez y capacidad de sugerencia, características que hasta hoy, el cine colombiano no tiene. (Capacidad de sugerencia, ojala, impulsada también desde las secciones de farándula de los noticieros).

Necesitamos seguir construyendo ideas sobre que es hacer crítica de cine como una critica documentada, evaluativa y propositiva sobre la sociedad. El cine no es ni tiene que ser una isla que habla del mundo de sus realizadores sólo hacia adentro de su imaginación; el cine es manifestación siempre de la imaginación y del temperamento de quien hace, la falta o el exceso, o el conformismo de quien hace como respuesta a lo que ocurre en la sociedad de su espacio tiempo.

En otros campos de lo social, los críticos también cumplen funciones necesarias para un adecuado avance de la educación, la economía, el medio ambiente, las finanzas y la cultura. Cuando se habla de los fenómenos y se descubren en ellos retrocesos y una incorrecta interacción de las variables; no se esta hablando mal, se están tratando de encontrar aspectos de mejoría; las distensiones, la diversidad de puntos de vista sobre un tema debería ser lo más pretendido, no la única mirada.

Lo único que hablará de nosotros cuando estemos muertos no se puede tomar a la ligera. Sería deseable que el Fondo de desarrollo cinematográfico nacional destine un porcentaje del dinero producto de la aplicación de la ley de cine a la crítica cinematográfica organizada de Colombia.

Felipe Moreno Salazar

Ricardo Méndez

Juan Guillermo Ramírez

German Ossa

Gustavo Valencia

Joel Sánchez

Fabio Ossa


Ralph Waldo Emerson Naturaleza (fragmento)

" Nuestra época es retrospectiva. Construye sobre los sepulcros de los padres. Escribe biografías, historias y juicios críticos. Las generaciones precedentes miraban a Dios y a la naturaleza cara a cara; nosotros, por medio de los ojos de aquellas. ¿Por qué no hemos de gozar también nosotros de una relación original con el universo? ¿Por qué no hemos de tener una poesía y una filosofía de la percepción y no de la tradición, y una religión revelada a nosotros, y no la historia de ellas? Envueltos, durante una temporada en la naturaleza, cuyas corrientes de vida circulan a nuestro alrededor y entre nosotros, y nos invitan, mediante las fuerzas que aportan, a una acción proporcionada con la naturaleza, ¿por qué hemos de andar a tientas entre los huesos secos del pasado, o enmascarar a la generación viviente con su vestuario marchito? El sol brilla también ahora. Hay en los campos más lana y lino. Hay nuevas tierras, nuevos hombres, nuevos pensamientos. Reclamemos nuestras propias obras, leyes y religión. "